El futuro es hoy y nadie cree que vendrá a reventarnos nuestra pequeña burbuja, palabras que, más que llevarnos a la reflexión, manifiestan una realidad que nos es familiar. Crepúsculo mecánico es una novela coral que pudiese sernos ajena en tiempo y forma, pero que representa la narrativa emergente de este nuevo siglo.
Berumen nos lleva de la mano a un nuevo mundo, sin tiempo específico, y nos muestra un panorama tan fascinante como alarmante. Pero, ¿es acaso tan distante de lo que vemos en la actualidad? La respuesta, más que un simple no, lleva consigo la necesidad de un análisis de lo que ocurre a nuestro alrededor. Las noticias, las cifras oficiales y la realidad en las calles no mienten; Crepúsculo mecánico se vuelve, entonces, una fiel descripción de la Distopía actual.
A pesar de los muchos temas contemporáneos y de carácter recurrente en el futuro distópico de Berumen, podemos hacer especial énfasis en el crecimiento y poder ejercido por el crimen organizado, la inequidad de género, la prostitución, las adicciones, la pobreza y desigualdades sociales, los dilemAs éticos y morales del irrefrenable avance tecnológico, y muchos otros que quedan flotando entre líneas. Sin embargo, algo que es imprescindible rescatar, es la esencia tan humana de la obra. Es esta misma esencia, esta sensibilidad tan característica en la narrativa de Berumen, lo que nos permite ver más allá de la Distopía; nos permite adentrarnos en la experiencia de seres de carne y hueso. –María Fernanda Dávila Ortiz.
Acepta las cookies para continuar