La antología de poemas que están por presenciar dentro de las siguientes páginas, no es sino un lapso poético de mi adolescencia, de mi despertar y aceptación literaria iniciada como recreo por los días, ocio por las tardes y desahogo por las noches. No son sino representaciones escritas (entre versos y estrofas) de mis alegrías, de mis pesares y diversas, pero similares, situaciones que con los días fui conociendo, comprendiendo y controlando. Además de pequeñas historias ficticias contadas mediante mis recién usadas coplas. 

Este libro, no es sino como un diario, poemas cronológicamente ordenados aunque no en constante seguimiento, ¿Qué más quisiera yo que escribir día tras día?, pero la inspiración no se llama ni se espera. Ella llega sola cuando lo desea: es inoportuna, es impuntual pero brillante y misericordiosa, pues también se presenta cuando sabe que busco consuelo. –Jemekroz Montoya