Un cuarto de siglo transcurre entre la visita del brigadier Pedro de Rivera a la frontera norte de México y el fin del gobierno provisional del licenciado Rafael Rodríguez Gallardo en Sonora. Etapa relativamente breve en la que, sin embargo, se produce en el noroeste de Nueva España una serie notable de cambios indicadores del grado de importancia que alcanzan los problemas que aquejan a esta región, cambios que al mismo tiempo parecen preludiar los grandes acontecimientos que tendrán lugar en la segunda mitad del siglo XVIII. Etapa, por otra parte, escasamente tratada por los historiadores, incluso ahora que ha surgido en México y en la misma Sonora, un importante plantel de nuevos y diestros cultivadores de la historia de Provincias Internas.

Provincia marginal y fronteriza del virreinato en las páginas de esta obra pero, no lo olvidemos, llamada a tener un peso singular en los destinos de México en las dos siguientes centurias, lo que justifica sobradamente el esfuerzo puesto en conocer esos días fundacionales que aquí se analizan.